Piel atópica

¿Notas que tu piel es muy reseca? Entonces probable que tengas una piel atópica, sobre todo si esa sequedad viene acompañada de comezón, irritación y descamación. Esto se da cuando tu piel no es capaz de producir la cantidad de grasa y al mismo tiempo cuenta con una barrera tan debilitada que no puede retener suficiente agua para mantener la hidratación en su punto ideal.

Esta afección se da por razones genéticas, alimenticias y externas; lo que significa que dependiendo de lo que uses, comas o hagas puedes tener episodios de más sequedad. Si bien tener la piel atópica no se puede prevenir, sí es posible tratarla y controlarla manteniendo una hidratación adecuada, evitando exponer tu piel a fuertes cambios de temperatura, sobre todo a la hora de bañarte. Utiliza limpiadores que remuevan la impureza al mismo tiempo que hidratan tu piel. ¡Acude al dermatólogo y arma tu rutina de skin care ideal!